viernes, 9 de junio de 2017



Realistas: El vaso está medio lleno de agua. Lo vemos como es en la realidad.
Idealistas: Nos pensamos que es un vaso medio lleno de agua, pero no lo vemos tal y como es.
Escépticos: Dudamos de que esté medio lleno. Puede se que sí o puede ser que no.

Crítica a la clase de filosofía

Ya llevo dos años recibiendo tus clases y personalmente pienso que son muy buenas. Una de las razones de que me guste la filosofía es lo bien estructurados que están los temas y la forma de explicar a los distintos autores con sus respectivas corrientes filosóficas. Las horas de esta asignatura son divertidas y amenas, lo que hace que se asimilen mejor los conocimientos y puedas recordarlos después. Otros profesores no se implican tanto en sus clases y por eso nos resultan aburridas. Si no entendemos algo, podemos estar seguros de que nos lo vas a volver a explicar pacientemente, y eso es muy bueno también.
Por otro lado, me gusta los exámenes que hacemos, pues con muy completos y no nos hacen sentir que nos hemos estudiado algunas partes para nada. Pero lo cierto es que aunque fuesen más escuetos, yo habría seguido teniendo la impresión de que lo que he aprendido es útil y con usos prácticos. Esta me parece una asignatura con un gran componente teórico, por lo cual que le des, bajo mi punto de vista, más protagonismo al lado práctico de la asignatura mediante exámenes prácticos que nos hacen razonar más que los teóricos, es positivo.

Aunque no tuviese la obligación de dar filosofía en el curso que viene, yo la habría elegido de todas formas porque la forma en la que transcurren las clases y los temas de los que aprendemos me parecen de gran valor para el correcto desarrollo de la capacidad crítica de una persona y de un ciudadano. 

La privacidad en las redes sociales

Muchas veces nos sentimos observados. Puede ser por la calle, en el instituto o en el trabajo o en cualquier tipo de situación. Muchas veces puede ser solo la sensación que nos da a nosotros, pero la verdad es que lo estamos. Dependiendo de cuántas cuentas en redes sociales tengamos o en qué redes, estaremos más o menos expuestos a la opinión de la gente y a la vista del resto del mundo. Esto conlleva toda una serie de consecuencias, pero una de las peores es la falta de privacidad. Se cuelgan a diario miles de fotos, videos y comentarios, a través de los cuales estamos  dando una serie de datos y de información personal a los internautas de los que no somos conscientes muchas veces.

De esto mismo se derivan muchos casos de ciberacoso, y al tratarse de Internet, donde las cosas permanecen para siempre, la situación se agrava. También se debe tener en cuenta la gran cantidad de robos que tienen lugar debido a usuarios que describen con demasiado detalle su rutina y los lugares a los que van. Esto es peligroso y mucha gente no se da cuente de ello.


Por último, sí, nos falta privacidad en Internet, pero hay redes sociales casi únicamente basadas en ver y que te vean, como es el caso de InstaGram. También hay otras cuya única razón de ser es hablar sobre nuestras propias vidas, como Ask. A lo que me refiero es que la elección de cuánto dejamos saber a los demás es nuestra, y podemos cometer errores, por lo que hay que reflexionar detenidamente sobre si debemos colgar ciertas cosas en Internet.